NICTOFOBIA… MIEDO A LA OSCURIDAD
¿Alguna vez ha sentido escalofríos en la oscuridad? o ¿ha sentido que se le congela la sangre y el estómago cuando mira hacia abajo desde muy alto? Estas sensaciones son las expresiones ante el miedo que pueden provocarnos ciertas situaciones.
El miedo es una emoción caracterizada por un sentimiento intenso ya sea de desagrado o de rechazo, que en general es provocado por la percepción de un peligro. La fobia es un trastorno psicológico ante cosas concretas. - El miedo es una emoción primaria ocasionada por la aversión natural al riesgo o a una amenaza. La fobia tiene a veces sentimientos de odio hacia algo que genera problemas emocionales o sociales. - El miedo es normal aunque irracional. Se pueden superar con voluntad. La fobia requiere de un tratamiento sugerido bajo un estudio previo del paciente. - El miedo es aprendido, a veces viene por malas experiencias. La fobia es el miedo persistente por un objeto o una idea y que es generalmente sin justificación. - El miedo puede tener la influencia de personas que signifiquen algo importante en la vida del otro. La fobia se da por no enfrentar el objeto o la situación. - El miedo puede ser controlado por la persona de alguna manera. La fobia no puede ser manejada de forma racional. La persona siente que es superior a ella.
¿Qué es una fobia?
Las fobias, a pesar de no tratarse de un trastorno psiquiátrico grave, son un trastorno psicológico con mucha repercusión negativa en la vida diaria de la persona.
El manual de diagnóstico de los trastornos mentales (DSM-IV) define una fobia como “un temor acusado y persistente que es excesivo o irracional, desencadenado por la presencia o anticipación de un objeto o situación específicos”. Se trata de la exageración de una experiencia común a todos los seres humanos, el miedo, con la diferencia de que el miedo nos prepara y ayuda a protegernos de situaciones de peligro real o imaginario (por ejemplo, al ver una película de terror), y las fobias hacen referencia a un hipotético peligro interno, irracional, intenso e incontrolable que bloquea el desarrollo de la existencia de la persona, ya que no protege, sino que limita, pudiendo llegar a afectar a la relación con su entorno y con sus seres queridos.
¿Cuáles son las causas?
Las causas de la aparición de una fobia no siempre están claras y puede no existir una única causa para explicar por qué determinadas personas la padecen.
Muchas fobias pueden tener su origen en la infancia. Puede que la persona, siendo menor, experimentase un suceso traumático y que después lo haya asociado como el objeto o situación que genera temor y que, por lo tanto, tiene que evitar. Todos los niños experimentan miedos y temores infantiles adaptativos y que van remitiendo a medida que el menor va creciendo, a diferencia de las fobias que lo que hacen es mantenerse e incluso incrementar con el paso del tiempo. La asociación puede ser directa, es decir, el elemento fóbico causa el temor en la persona a consecuencia de un suceso (por ejemplo, un niño que es mordido por un perro y que tras ese hecho, desarrolla la fobia a los perros), o puede ser una asociación indirecta, lo que significa que la persona tras un suceso traumático con un elemento concreto, lo desplaza a otros.
Otra de las posibles causas son los factores genéticos y ambientales que pueden favorecer la aparición de la fobia. También como repetición a través de un comportamiento aprendido, por ejemplo, que los hij@s repitan las fobias de sus progenitores.
También puede ocurrir que la persona no recuerde la causa por la que se desarrolló la fobia, pero de cualquier manera e independientemente del desencadenante, lo común a todas ellas es la reacción de evitación por parte de la persona y el deterioro que esto puede conllevar a diferentes niveles: social, laboral, familiar, afectivo….
¿De dónde viene el miedo a la oscuridad?
¿Nunca te has preguntado porque cuando se apaga la luz repentinamente tememos lo peor, aunque sea por un segundo? ¿Por qué muchos niños atraviesan fases donde necesitan una luz prendida para dormir? ¿Qué mecanismos psicológicos se esconden detrás del miedo a la oscuridad?
Quizás muchas de estas preguntas ameritan respuestas mucho más amplias y profundas de las que aquí se esbozan. Pero de todas formas, intentaremos acercarnos lo más posible a estas teorías que explican de dónde proviene el miedo innato, tan primario y antiguo como la humanidad misma.
Nictofobia o fobia o miedo a la oscuridad: Origen, tratamiento...
Reside en la propia naturaleza de la imaginación humana. La ausencia (parcial) de luz hace que instintivamente perdamos esa sensación de control sobre el entorno.
La fantasía juega un rol fundamental liberando nuestra imaginación más allá de los límites que la racionalidad impone, generando un sentimiento de miedo hacia la misma posibilidad de perder el control.
Como en la mayoría de las fobias, es tu propia imaginación la que se esconde detrás de los miedos. Acepta este hecho y verás que eres capaz de dormir con tranquilidad. También puedes explicárselo a tus hijos o hermanos pequeños en un lenguaje más simple.
Nictofobia o fobia o miedo a la oscuridad se conoce como un trastorno que padece una persona que teme a la oscuridad, a la noche o en su defecto sitios con poca iluminación. Es de saber que la noche siempre ha sido motivo de temor para los niños en su mayoría pero aún así los adultos también pueden llegar a padecer este trastorno que tiene sus consecuencias.
El padecer de nictofobia significa tener un miedo intenso e irracional a todo lo relacionado con la oscuridad, por lo general siempre existe en los seres humanos este miedo normal, debido a que por las noches o durante la oscuridad nuestra visión se dificulta y encontrarnos con lo desconocido siempre causará temor, ahora bien si este temor pasa a ser algo exagerado es donde se crea el problema y pasa a ser un trastorno que en muchos casos requiere ayuda para superarlo o controlarlo.
En la oscuridad suceden situaciones de peligro, estamos expuestos a muchos riesgos, se ha tomado como escenario perfecto en peliculas y escenas de terror, esto ha motivado tambien a padecer este trastorno. Por lo general la persona que padece este trastorno piensa que le pasara algo, lo imagina y por eso se incrementa cada vez más su miedo cada vez que lega la noche, en los casos de otros tipos de fobias, pasa casi lo mismo pero en este caso la noche se presenta todos los días sin poder evitarlo.
Son casos que deben ser manejados con prudencia y con la seriedad que merece, porque la persona con este tipo de trastornos puede llegar a ser paralizado de terror y esto puede ocasionar males mayores y más si se encuentra en situaciones de peligro o riesgo que puedan poner en peligro su propia vida. Este miedo irracional debe ser tratado.
Origen del miedo a la oscuridad
Cuando somos niños el miedo a la oscuridad es algo normal y es que cuando las luces se apagan nuestra imaginación empieza a funcionar, el problema de este miedo comienza cuando ya pasamos a la edad adulta. El origen de esta fobia puede ser originado por algunos motivos entre los cuales incluyen según la psicología Freudiana cuando el niño es separado por primera vez de la habitación de sus padres para dormir en su propia habitación solo, se siente desprotegido en ese momento y su cerebro empieza a funcionar todo con pensamientos negativos a pesar de ser un sitio donde tendrá su propio espacio.
El hecho de tener que estar solo en medio de la oscuridad le produce miedo y por esto que en muchas ocasiones los niños piden que no se pague la luz o en su defecto se les coloca en sus cuartos lamparas que no dejen en total oscuridad el cuarto.por lo general esto sucede a los dos años que es más o menos la edad en que el niño empieza a dormir separado de sus padres. Este miedo es relativo en cada niño en unos sera más intenso que en otros. Pero esto le sucede a todos, porque en algún momento cuando fuimos niños sentimos miedo cuando se presentaron este tipo de situaciones en nuestra vida.
¿Cómo se llama la fobia a la oscuridad?
La fobia a la oscuridad se trata de un trastorno que afecta por lo general a los niños, pero que también aqueja a los adultos, este miedo irracional se manifiesta en ansiedad y temor intenso y lo produce la oscuridad o la falta de iluminación en algún sitio. La persona que lo padece se siente incapaz de explicar su miedo de una manera coherente, el individuo por lo general siempre evitara exponerse a sitios o lugares donde exista oscuridad, cosa que le puede traer consecuencias porque ese terror a las oscuridad puede entrar en pánico y la persona de podría paralizar y generar un caos porque si esta en situación de peligro no podría reaccionar.
La fobia a la oscuridad se llama nictofobia y también se conoce con otros nombres como escotofobia, acluofobia, ligofobia, mictofobia. El miedo a la oscuridad puede estar presente en cualquiera de nosotros pues es natural y más si estas expuestos a situaciones de real peligro, se torna una enfermedad cuando ese miedo se siente cuando quedamos en oscuridad sin ningún peligro aparente.
Del miedo a la fobia a la oscuridad
El miedo se traduce como la sensación de real angustia que genera una situación de peligro o simplemente la imaginación y la fobia es la ansiedad y miedo irracional o enfermizo hacia, alguna cosa, objeto animal o situación, por lo tanto pasar del miedo a la fobia resulta un evento de gran magnitud considerando el significado de cada termino. Cualquier ser humano siente miedo en algún momento de su vida y más si ha tenido que pasar por situaciones inesperadas o que marcaron su vida como por ejemplo un robo o atraco, un divorcio entre otros eventos de relevancia, es totalmente normal el sentir miedo si pasas por este tipo de situaciones, el problema empieza cuando esto se torna intenso y afecta tu vida cotidiana.
Cuando ya el miedo se convierte en fobia lo podemos identificar porque se trata de una especie de atadura que nos impide seguir una vida normal y corriente, cuando en las noches sentimos que si no tenemos el bombillo encendido algo nos sucederá y si la apagan entras en pánico es un síntoma claro de tu fobia por la oscuridad, por lo general una persona con este tipo de trastorno suele estar siempre en constante sosobra y hasta se comportara paranoica vigilando que antes de acostarse por ejemplo debajo de su cama no haya nadie, que las puertas estén bien cerradas entre otras cosas.
Causas de la nictofobia o fobia o miedo a la oscuridad
Según estudios se ha afirmado que una de las causas de la aparición de este trastorno se debe a la separación que sufre una persona en cualquier momento de su vida o etapa lo cual desencadena ese miedo inexplicable y es que es comprensible que sintamos temor ante los cambios que se presentan en la vida, solo que debe ser un temor normal y no pasar a los extremos, por ejemplo cuando estamos acostumbrados a dormir en el mismo cuarto con mamá y papá el solo hecho de pensar que seremos separados de hay nos produce miedo.
Esta es una de las causas que puede interferir en la aparición de este trastorno, también están los factores evolutivos cuando los seres humanos se dedicaban a ir de caza por la noches, esto era peligroso pues en el camino tenían que enfrentarse a ciertos animales peligrosos, es por ellos que desde hace muchos años a la noche se le atribuyen los eventos del mal, la aparición de monstruos y cosas paranormales, se puede decir que es la causa de que hoy la humanidad padezca de nictofobia o fobia o miedo a la oscuridad.
También se relaciona a causas como acontecimientos angustiantes o algún trauma sufrido durante la noche como atracos, robos, accidentes, alguna situación de violencia, algún evento relacionado puede desencadenar este tipo de fobia e la oscuridad, pues ellos generan malos y negativos recuerdos y nos hacen ver la noche como peligrosa. Además se atribuye este tipo de trastorno a las personas que de alguna u otra manera sufre procesos de ansiedad o depresión, al pasar por cualquier evento desagradable o negativo en la noche puede originar que esta persona sufra de nictofobia o fobia o miedo a la oscuridad.
Síntomas de la nictofobia..
Como cualquier otra fobia esta esta precedida por varios síntomas que aparecen en el cuerpo cuando se esta en presencia de la situación temida, en este caso la noche o en su defecto la oscuridad como tal. Las personas que padecen de este trastorno deben lidiar cada día de sus vidas con este padecimiento cada vez que se acerca la noche, se vuelven maniáticas al tal punto que supervisan todo muy bien antes de dormirse, eso si logran conciliar el sueño con lo que piensan que les puede pasar en medio de la oscuridad.
Estas personas dejan las luces encendidas, son incapaces de dormir en oscuridad, ya que este miedo exagerado lo proporciona la distorsión de la realidad al imaginar cosas negativas y al verse solo se intensifican sus miedos. El miedo se vuelve tan intenso que los primeros síntomas son sudoración intensa en todo el cuerpo, nauseas, temblores, inmensas ganas de vomitar, las palpitaciones aumentan, malestar abdominal, confusión, escalofrió y hasta un bloque de la mente.
Tratamiento para la fobia a la oscuridad
Cuando estamos en presencia de una persona con nictofobia o fobia o miedo a la oscuridad y el problema se hace cada vez más agudo e imposible de controlar desde la casa, es la hora de tomar la decisión de acudir a un especialista que pueda ayudarnos a controlar este problema que nos aqueja y así poder tener un sueño y una vida plena y normal. El especialista a través de una evaluación previa determinara cual será el tratamiento idóneo recomendado para cada paciente.
Los tratamientos que se prescriben van desde fármacos hasta terapias psicológicas que ayuden al paciente primero a conciliar el sueño y descansar correctamente y segundo a controlar sus pensamientos y la consciencia de su estado para así poder ir avanzando poco a poco y vencer estos miedos. Entre las técnica utilizadas por los especialistas están las de relajación esto hará que la persona con este padecimiento tome mayor control sobre su emociones su activación física y cognitiva y pueda enfrentar sus miedos.
También manejan técnicas de exposición, según estudios son unas de las más aconsejables y acertadas para manejar este tipo de trastorno, debido a que esta técnica esta basada en enseñar al paciente varios tipos de relajación como por ejemplo aprender a controlar la respiración, atención plena que ayudan a reducir ese miedo intenso que se siente. La técnica es efectiva, ya que el paciente que se expone regularmente va adquiriendo mucho más rápido una tolerancia aceptable hasta llegar el punto de tener el control total. Existen métodos que incluso exponen al paciente a los miedos que padecen en este caso la oscuridad empezando por lo más simple hasta lo más difícil para ellos, esto es utilizado como una herramienta eficaz para el desarrollo y eficacia en al tratamiento de la nictofobia o fobia o miedo a las oscuridad. Mira este vídeo de como curar la nictofobia a traves de hipnosis.
CONCLUSIÓN:
Esta fobia logra que el individuo por un momento determinado pierda la noción de la realidad, asustándose de tal manera que toma actitudes desesperadas sin poder controlar sus miedos antes situaciones irrelevantes y que carecen de importancia como por ejemplo un ruido y ya la persona imagina millones de cosas. Por lo general las personas que sufren de nictofobia o fobia o miedo a la oscuridad son los niños pero que con el crecimiento y las experiencias vividas van desapareciendo, más sin embargo en adultos también se presentan estos trastornos.
